Ghana quiere la revancha
Ghana llega a Brasil para disputar su tercer Mundial consecutivo después de la gran imagen que dejó en Sudáfrica, donde cayó en cuartos de final ante Uruguay cuando el pase a semifinales parecía un hecho al alcance de la mano. Ese será de nuevo el gran objetivo, ser el primer país africano que finaliza entre los cuatro primeros clasificados en una fase final.
En la fase africana lideró el primer grupo con cinco victorias y tan solo una derrota, encajada en campo de Zambia. Después, en la eliminatoria final, se midió a Egipto en un duelo que enfrentó a dos grandes bloques que merecían la clasificación. En la ida la lucha que se esperaba no se vio y Ghana venció por 6-1 al destrozar la defensa egipcia con dos tantos de su líder en la delantera, Asamoah Gyan.
Gyan, quien falló un penalti decisivo en la prórroga ante Uruguay hace cuatro años, se marchó al fútbol árabe, a las filas del Al Ain, donde acumula cifras goleadoras extraordinarias. Sin duda alguna, podría jugar en cualquier liga europea. En 66 partidos de liga en los Emiratos suma 82 goles y en la actual edición de la Champions asiática es el máximo artillero con diez goles en ocho encuentros.
Le acompañarán otros jugadores, que destacan por su velocidad, desborde y fuerte pegada. Uno de los menos conocidos es Waris, que milita en el Valenciennes y esta campaña ha anotado nueve goles. También aparecerán otros como André Ayew, que suele jugar más centrado y no ha evolucionado como esperaba, o su hermano Jordan, más joven y aún por confirmarse en la élite. Quien progresa a pasos agigantados es Atsu, fichado el verano pasado por el Chelsea, que ha completado un buen año en el Vitesse, donde ha sido titular y ha deslumbrado con su juego eléctrico.
En el centro del campo aparecen jugadores mucho más veteranos como Muntari o Essien, que comparten el vestuario en Milán aunque el ex del Madrid no ha sumado demasiados minutos sobre el terreno de juego. En la media punta debe ser clave Boateng, por su capacidad física y llegada al área. Cualidades similares a las que muestra Kwadwo Asamoah en banda, donde puede jugar como interior o carrilero. Por momento de forma también debería ser importante Acquah, que tras pasar dos años en blanco en Hoffenheim ha sido básico para el Parma.
En línea defensiva no surgen nombres importantes. Quizá el más mediático sea Opare, que pasó por la cantera del Real Madrid y ahora es un lateral derecho destacado en el Standard belga. En la banda contraria suele aparecer Inkoom, algo olvidado en el modesto Platanias griego. La pareja de centrales la formarán Boye, a medio camino entre el Rennes y su equipo filial durante este año y Akaminko, jugador con una gran confianza en su calidad técnica. En el lateral derecho también estará disponible Afful, asentado desde hace años en el Esperance de Túnez, uno de los clubes más prestigiosos de África. Eso llevaría a Opare a jugar como central. Aunque existan otras opciones en jóvenes como Sumaila y Mensah.
Su debut en Brasil será ante Estados Unidos un partido clave en sus aspiraciones ya que tendrán enfrente al rival, en teoría, más débil de grupo y de no sumar la victoria el pase a octavos de final se complicaría en exceso. Con los jugadores que poseen no tendrán problemas a la hora de ver puerta pero su mediocentro, a la hora de mantener la posesión, y defensa dejan más dudas.
Juan Antonio Lopesino
Twitter: @jumifutboltotal
